Las buenas o malas circunstancias que no tocan enfrentar.
Lo importante es que racionalmente elijamos conservar en el recuerdo las vivencias positivas.
La sonrisas, los buenos momentos, el buen trato, las actitudes positivas que hemos tenido con los demás y la que tuvieron con nosotros eso hará que nuestra autoestima se mantenga equilibrada.
Hay que atreverse a vivir una vida no, en blanco y negro, sino dándole el tinte de color adecuado para ser feliz
Néstor Salgado
Poeta